Un nuevo estudio muestra que solo en EEUU y Canadá hay ahora 3.000 millones de pájaros menos que en 1970, lo que supone un 29% menos. A principios de este año han desaparecido el 21% de las aves de alta montaña. Una situación alarmante y que se extiende a lo largo y ancho de nuestro planeta. Los últimos datos que constatan el desastre los publica la revista Science.

Una investigación, liderada por el Laboratorio de Ornitología de Cornell, en Nueva York, muestra que solo en Estados Unidos y Canadá se ha perdido el 29 % de los pájaros, o lo que es lo mismo 3.000 millones de ejemplares desde 1970. “Esperábamos ver un declive continuado en las especies amenazadas. Pero, por primera vez, los resultados también muestran pérdidas generalizadas entre las aves más comunes de todos los hábitats” KEN ROSENBERG Principal autor del estudio Este dato no se refiere a la extinción, sino a la abundancia de población.

Aunque no desaparezcan especies de aves, cada vez hay menos ejemplares. La migración de aves ha disminuido del 14% en la última década Además, el 90 % de los pájaros perdidos están clasificados en 12 familias de aves incluidos gorriones, pájaros cantores, pinzones y golondrinas, que son especies comunes y muy extendidas con un papel crucial en las cadenas alimenticias y el funcionamiento de los ecosistemas. La pérdida de hábitat: la principal causa… Aunque el estudio no analiza las causas de estas mermas, apunta que el mayor factor que conduce a estas pérdidas es, probablemente, la pérdida y degradación generalizadas del hábitat, especialmente, debido a la intensificación de la agricultura industrial y la urbanización.

Esta pérdida enorme de población de aves en América del Norte no es aislada, porqué en todos los continentes del Mundo se registra disminución de ejemplares. De hecho, muchas especies de aves que han experimentado una disminución en su población, y que se han estudiado en América del Norte y Europa, migran hacia otros continentes lo que supone que África o América del sur (donde no existe estudios en profundidad sobre esta alarmante situación) también sufren la pérdida de aves.

Los datos son coherentes con lo que vemos en otras partes y con otros taxones -grupos de organismos emparentados- y que muestran disminuciones masivas, incluidos los insectos y los anfibios”, Peter Marra, de la Universidad de Georgetown