Se le da prioridad al transporte público, como autobuses, metro y bicicletas. Los coches de combustión interna tienen prohibido circular en la ciudad y sólo se ven algunos cuantos coches eléctricos, ya que el principal medio de transporte es la bicicleta

Corea del Sur, 28 julio de 2019.- Songdo nació como proyecto en el año 2000 y en 2002 arrancó su construcción con un presupuesto inicial de 35.000 millones de dólares. Está ubicada a 65 kilómetros de Seúl a lo largo de un territorio recuperado junto al Mar Amarillo. Desde un inicio, este proyecto llamó la atención del mundo debido a su particular enfoque, ya que se fijó la meta de emitir al menos 50% menos gases de efecto invernadero comparada con Seúl.

La ciudad tiene el tamaño del centro del Boston (30,5 millones de metros cuadrados) y a día de hoy ya emite un tercio menos de gases de efecto invernadero si la comparamos con Seúl. Esto se consiguió en parte porque se determinó que el 40% del área de la ciudad estaría destinada a áreas verdes (el doble de Nueva York). El parque más grande de Songdo, ubicado en el centro de la ciudad, está inspirado en Central Park y mide casi 410.000 metros cuadrados.

Toda la zona es de uso mixto, es decir, tanto las tiendas como las oficinas, parques, hospitales y colegios están cerca de las zonas residenciales, lo que hace que los habitantes se puedan mover entre casa, trabajo y colegio sólo caminando. De hecho una de las reglas para las zonas residenciales es que las paradas de autobús o metro estuvieran a máximo 12 minutos a pie. En el interior de Songdo hay casi 25 kilómetros de carriles bici, los cuales se conectan con un gran circuito de 145 kilómetros que cubre la ciudad.

Al día de hoy hay cerca de 20.000 unidades residenciales habitadas y se estima que hay poco más de 100.000 habitantes, pero se cree que esa cifra se elevará por encima de los 300.000. Más de 100 edificios cuentan con certificación LEED y se está apuntando a que la mayoría de edificios residenciales cuenten con esta certificación en un futuro. Los actuales edificios LEED reciclan al menos el 40% del agua que usan y la energía proviene de fuentes renovables, la cual se almacena en sus propias baterías, por lo que el uso de la red de energía eléctrica sólo representa el 20%.

Songdo no ha llamado la atención de los habitantes y las compañías, ya que hasta este momento sólo 1.600 empresas cuentan con oficinas en la ciudad, de las cuales sólo 58 son extranjeras. Uno de los principales argumentos es que todo se sigue centralizando en Seúl, la cual está ubicada a casi dos hora de trayecto.

Por lo anterior, pocas personas han decidido mudarse a Songdo, sobre todo ante la poca actividad comercial y fuentes de empleo, ya que al no haber empresas o gente interesada en invertir en algún negocio local, la ciudad no resulta atractiva para la mayoría de la gente por más tecnología que tenga.

A pesar de esto, el gobierno de Corea está apostando todo por este modelo de ciudad, por lo que han dado incentivos a colegios de prestigio y compañías locales para que se muden a Songdo con tal de despertar el interés de los ciudadanos, pero hasta el momento no ha sido suficiente. Veremos qué sucede en un par de años cuando la ciudad esté terminada.